VALLADARES NUEVO D.T. DE HONDURAS SUB 17

LUSACO

No hay mal que por bien no venga. Las diferentes versiones sobre el porqué el estratega hondureño Jose Valladares no renovó contrato con el DEPORTIVO WALTER FERRETI pasan ahora al bolsón de las especulaciones y él ha salido con un puesto al que muchos apuestan y pocos alcanzan en su natal Honduras.

José Francisco Valladares Moncada fue nombrado hoy como nuevo Director Técnico de la Selección Nacional Sub 17 de nuestro vecino Honduras con el objetivo de encaminar a los catrachos al Mundial de Emiratos Árabes Unidos del 2013.

Lamentablemente Nicaragua deja escapar otra oportunidad de tener al frente de sus combinados nacionales a una persona con previa demostración de conocer el fútbol casero, de mostrar cambios con su trabajo y además de obtener resultados. Esas tres cosas las tiene Valladares y nadie lo puede objetar nos guste o no.

Ah, que si este Ferreti no llega a la final algunos directivos rojinegros se arrepentirán de no haber llegado a un acuerdo salarial con quien los metió a cuatro finales consecutivas. Ah, que si el Managua FC fracasa no llegando a la final se les cae lo que en teoría era su primera opción para dirigirlos en el Clausura. Ah, que en Diriamba la mayoría de aficionados querían al catracho al frente del histórico Diriangen … Y ya ni se diga de los que fielmente creemos que merecía una oportunidad en la azul y blanco de la tierra de lagos y volcanes.

El asunto –creo yo- no era de pesos y centavos. Valladares no es el típico entrenador que va a exigir un salario que no esté acorde con la realidad económica del país y del entorno que rodea al modesto balompié nicaragüense; incluso todos sabemos que hay jugadores extranjeros que fácilmente lo superan en salario y sus resultados son tan pobres que dejan mucho que desear. Era cuestión de visión, de oportunidades y sobre todo de voluntad por mejorar y salir de más de lo mismo.

Con lo anterior nos queda una lección que aprender. Necesitamos que sigan viniendo directores técnicos extranjeros, darles continuidad, plantearles objetivos y exigirles resultados. Habrá alguno que pensara que lo económico lo impide, otros apostaran a gente que no ha ni demostrado ni ganado nada y otros preferirán hacerse de la vista gorda.